Antes de las elecciones generales, el presidente Ho Chi Minh consideró esta labor como una oportunidad para que toda la nación eligiera libremente a personas capaces para hacerse cargo de los asuntos del país. Todos aquellos que se mostraban dispuestos a encargarse de los asuntos nacionales tenían derecho a presentar su candidatura a las elecciones.
 

Los votantes de la capital estudian la lista y las biografías de las personas que presentan su candidatura a las elecciones generales (Foto documental: VNA)

Fue en 1946, cuando Vietnam se encontraba en una situación crítica, con muchos enemigos tanto dentro como fuera de su territorio. En aquél entonces, el presidente Ho Chi Minh y la Liga para la Independencia de Vietnam, conocida como Viet Minh, decidieron invitar a todas las personas no pertenecientes a este Frente a unirse a la lista de candidatos a los comicios. Esta invitación demuestra el respeto del Viet Minh hacia el derecho del pueblo a la libertad y la democracia, buscando a los ciudadanos más talentosos para el desempeño de los puestos de gobierno del país. Como resultado, fueron elegidos 333 miembros para componer la Asamblea Nacional en representación de todos los sectores, así como de los diferentes partidos que a la sazón, existían. Esta victoria supuso un hito histórico en el proceso de desarrollo democrático de Vietnam.

El historiador Duong Trung Quoc, secretario general de la Asociación de Ciencias Históricas de Vietnam, compartió que nadie hubiera podido imaginar que, en un contexto en que el país acababa de salir de una ardua situación y con más del 90% de la población analfabeta, la nación vietnamita celebraría unas elecciones generales tan democráticas y civilizadas.

“La celebración de unas elecciones generales sobre el principio del sufragio universal que otorga el derecho de voto a todos los ciudadanos, sin importar su sexo, la etnia a la que pertenecen o la religión que profesan, no era algo tan común en aquel momento. Incluso, en algunos países europeos, el sufragio no era universal, ya que la igualdad de género, que permite a las mujeres participar y presentar su candidatura en las elecciones, no estaba plenamente desarrollada”, declaró el prestigioso académico.

El nacimiento de la Asamblea Nacional de Vietnam fue tanto un logro como una demanda apremiante de la Revolución. El poder legislativo nació del humo de la feroz lucha por la independencia de la patria. De esta manera, es el Parlamento de la independencia y de la gran unidad nacional, ya que aúna a los representantes de las regiones del Norte, el Centro y el Sur para expresar la voluntad de todos los compatriotas a lo largo y ancho del país.

En particular, el máximo órgano legislativo contaba con agudos talentos de todas las generaciones de patriotas vietnamitas de aquella época. En su sede se reunían representantes de todas las ramas, géneros, trabajadores, campesinos, burgueses, hombres de negocios, intelectuales y activistas culturales de renombre, además de representantes de todas las corrientes religiosas, comunidades étnicas, facciones políticas, como el Partido Comunista, el Partido Democrático o el Socialista, y personas militantes de otros sectores políticos o incluso no pertenecientes a ninguno.

Bajo el liderazgo del presidente Ho Chi Minh, implementando la política de unificación y reconciliación, el Consejo de Gobierno reservó 70 escaños sin votación para la Alianza Revolucionaria de Vietnam (Viet Cach) y el Partido Nacional de Vietnam (Viet Quoc) en la Asamblea Nacional. Según el profesor asociado y “Maestro del Pueblo”, Le Mau Han, solo Vietnam y el presidente Ho Chi Minh podían llevar a cabo tal proeza.

“Fue algo maravilloso. En la creatividad se encuentran principios. Tal situación requirió de la conciliación. Elegir al Parlamento era una tarea muy difícil. De esta manera, la Asamblea Nacional de Vietnam fue probablemente la única en aquella coyuntura”, estimó.

Según el secretario general y presidente de la Oficina de la Asamblea Nacional, Nguyen Hanh Phuc, el 75º aniversario de las primeras elecciones parlamentarias de Vietnam es una ocasión para revisar y enorgullecerse de los logros del órgano legislativo del país, obtenidos a lo largo del camino recorrido hasta hoy. Es también una oportunidad para definir de modo más claro qué hacer en 2021, año en que se llevarán a cabo los comicios generales a la Asamblea Nacional y a los Consejos Populares en todos los niveles para el período 2021-2026, afirmó el alto funcionario.

El Gobierno de la República Democrática de Vietnam elegido por la Asamblea Nacional en el segundo período de sesiones de su primera legislatura (del 28 de octubre al 9 de noviembre de 1946) (Foto documental: VNA)

“Los últimos 75 años de desarrollo a lo largo de las 14 legislaturas de la Asamblea Nacional han dejado lecciones muy preciadas. Ahora, en las elecciones venideras, ¿cómo elegiremos a los diputados adecuados? Nos propusimos aumentar en un 4% el número de legisladores profesionales y elevar la cifra de mujeres por encima del 30%, junto con la proporción de diputados pertenecientes a minorías étnicas y jóvenes. Al mismo tiempo, debemos garantizar la democracia para que los votantes descubran, seleccionen y presenten ante la Asamblea Nacional a los diputados de élite. Si cumplimos estas condiciones, seguro que podremos elegir a los mejores”, afirmó Hanh Phuc.

Con la tradición y las experiencias acumuladas a lo largo de los últimos 75 años y profesando un sentido de responsabilidad hacia la patria, la Asamblea Nacional seguirá consumando su misión y desempeñando con rigor su función de representación del pueblo, cumpliendo con el lema: “Solidaridad, innovación y acción en beneficio de la ciudadanía”.

PCV (Fuente: VOV)